En el Día internacional de la mujer matemática queremos resaltar la importancia de las mujeres y las matemáticas. Por esa razón, hoy te traemos un nuevo contenido hablando sobre 15 mujeres que han influido en esta disciplina a lo largo de la historia y sin las cuales no tendríamos el conocimiento necesario para lograr los avances tecnológicos modernos. ¡Continúa leyendo y conoce a cada una de ellas!
Durante muchos años se ha negado el acceso a las mujeres a muchas áreas del conocimiento. Las matemáticas fueron una disciplina donde se desempeñaban hombres principalmente y eran reconocidos por sus aportaciones científicas en esta área. En gran parte de la historia, cualquier disciplina científica era únicamente pensada para el sexo masculino.
Sin embargo, las mujeres y las matemáticas han tenido una larga relación por años sin siquiera saberlo. Se adjudica a las mujeres las primera interacciones con las matemáticas al haber hallazgos arqueológicos que lo demuestran como el hueso de Ishango o por los ciclos menstruales que tienen un papel importante dentro del conteo, las matemáticas y la medición del tiempo.
A pesar de la poca visibilidad entre las mujeres y las matemáticas, ha habido una muy amplia cantidad de científicas matemáticas que han aportado mucho al ámbito académico con su excelencia. Aquí te contamos sobre 15 de ellas que han destacado por su influencia en esta disciplina a lo largo de los años.
Hypatia de Alejandría es considerada una de las primeras mujeres científicas de la historia y también es la primera cuya vida está documentada. A pesar de que la totalidad de su trabajo está perdida, podemos encontrar referencias a ellos en un sin fin de textos. Su trabajo estaba enfocado en estudios de álgebra, geometría e incluso en otras ramas como la astronomía y la filosofía. Se dice que Hypatia fue considerada la mejor matemática y astrónoma del mundo de su época.
Madamme Châtelet fue una aristócrata francesa quien, pudiendo dedicarse a la vida de lujos que su posición le proporcionaba, eligió vivir una vida dedicada al estudio de la ciencia. Su vida académica se enfocó principalmente en las matemáticas y la física, por lo que uno de sus trabajos más reconocidos, además del propio, es la traducción y análisis de la obra de Newton. Su ensayo sobre “La naturaleza y propagación del fuego” (1744) y los tres volúmenes de su obra Las instituciones de la física son sus trabajos más reconocidos.
Sophie Germain fue una matemática autodidacta francesa que, a pesar de los impedimentos que tuvo para entrar al mundo de la ciencia por ser mujer, tiene un gran renombre gracias a su trabajo con la teoría de los números. Su trabajo estaba enfocado principalmente en el teorema de Germain, nombrado en su honor, y la teoría de la elasticidad que, si bien tiene puntos discutibles, representó un gran impacto dentro de la ciencia.
La divulgadora escocesa, Mary Somerville, incursionó en las matemáticas y la astronomía de forma autodidacta. Fue la primera mujer en ser publicada en la revista científica más antigua y prestigiosa del mundo: Philosophical Transactions. Su libro Sobre la conexión de las ciencias físicas fue traducido al francés, alemán e italiano, lo que lo convirtió en uno de los libros de ciencia más famosos del siglo XIX.
Ada Lovelace fue la primera persona capaz de desarrollar un algoritmo que puede ser procesado por una máquina. De joven, tuvo como mentora a Mary Somerville, quien fue de gran ayuda para iniciar con su formación científica. En la adultez, después de hacer la traducción de un artículo que hablaba sobre la máquina analítica de Charles Babbage, Ada añadió sus propias notas con una teoría que revolucionaría el mundo de la programación. Su muerte prematura le impidió ahondar más en sus estudios matemáticos, pero 100 años después de su muerte fue posible comprobar sus teorías sobre la máquina de Babbage.
Debemos a Elizabeth Langdom Williams, astrónoma y experta en cálculos estadounidense, el descubrimiento de Plutón. En 1915, a través de un proyecto donde se trabajaba con cálculos muy complejos para determinar la posición de un nuevo planeta que estaba más allá de Urano y Neptuno. Los cálculos que realizó Elizabeth sirvieron para comprobar a finales de 1920 la presencia del “Planeta X” que, aunque ahora ya no es considerado un planeta, es conocido como Plutón.
Emmy Noether es considerada la madre de la álgebra abstracta, ya que sus estudios sobre la teoría especial y general de la relatividad sirvieron para resolver algunos problemas planteados dentro de la teoría general de la relatividad de Einstein. A Emmy se le negó la posibilidad de tener una vida digna como investigadora en Alemania por el simple hecho de ser mujer, sin embargo, al mudarse a Estados Unidos, pudo trabajar dirigiendo seminarios e investigando para el Instituto Princeton.
Mary Cartwright, matemática británica, es a quién se debe una gran parte de la investigación sobre el caos. Su inmersión dentro del ámbito científico le dió grandes reconocimientos siendo la primera mujer elegida como miembro de la Royal Society en 1947, así como ser la primera y única mujer hasta la fecha en presidir la Sociedad Matemática de Londres. También tuvo reconocimientos por parte de la corona Británica con el título Dama Comandante de la Orden del Imperio Británico en 1969.
María del Carmen Martínez Sancho fue la primera doctora española en Matemáticas al recibirse en la rama de las Ciencias Exactas en 1928. Dedicó la mayor parte de su vida a instruir a los demás en esta disciplina dando clases en distintos recintos como el Instituto-Escuela y el Instituto Infanta Beatriz, ambos en España, así como en el Instituto Central de Educación e Instrucción en Alemania. En 1927 fue aceptada en la Sociedad Matemática Española.
Grete Hermann fue una matemática y filósofa alemana que desde joven estuvo interesada en la ciencia. En su época universitaria conoció a Emmy Noether, quien decidió adoptarla como su pupila y protegida. A pesar de sus muchas capacidades científicas, Grete siempre sufrió los estragos de la época de ser una mujer dentro de este campo, por lo que mucho de su trabajo no fue lo suficientemente reconocido como debió haber sido. Participó activamente en la lucha contra los nazis por muchos años y, tras la muerte de su mentora y exilio obligado, dejó de lado su interés científico y se dedicó a la filosofía, la política y la educación hasta su muerte.
Marie-Louise Jacotin fue una matemática parisina quien destacó no solo por sus estudios sobre mecánica de fluidos y álgebra, sino también por su ardua lucha para dar reconocimiento a las mujeres dentro de la ciencia. Tuvo una relación académica y personal cercana con Emmy Noether quien fue parte importante de su formación. Junto con su esposo Paul Dubreil, también matemático, escribió el libro Lecciones de Algebra Moderna que se ha traducido a muchos idiomas.
Grace Hopper fue una destacada científica computacional y marina estadounidense. Si bien su amor por el mar hizo que dedicara mayor parte de su tiempo a lo naval, Grace es considerada una de las primeras ingenieras de software y una de las que más ha influido en el desarrollo de la programación actual. A ella se le adjudica el primer uso del término “bug” para referirse a un error de programación.
La estadounidense Katherine Johnson fue una física, científica espacial y matemática a quien se debe muchos de los avances hechos por la NASA. Su proceso educativo se vio lleno de altibajos no solo por ser mujer sino también por su ascendencia afroamericana, sin embargo logró entrar a distintos espacios de estudio donde no se había permitido antes como el West Virginia University. Fue ella quien calculó la trayectoria del Apollo 11 que llevaría al hombre a la luna en 1969.
Julia Robinson fue una matemática estadounidense interesada por temas de álgebra que dedicó mucho de su carrera a buscar soluciones a problemas planteados por otros estudiosos como el de David Hilbert, matemático alemán. Fue elegida como miembro de la división de matemáticas de la Academia Nacional de Ciencia, siendo la primera mujer a la que se le daba ese cargo; también fue presidenta de la Sociedad Americana de Matemáticas de 1982 a 1984.
La matemática británica Ann Mitchell tuvo grandes aportaciones para esta disciplina, sin embargo no fue hasta los años 70 que se dio a conocer el valor de su trabajo. Durante la Segunda Guerra Mundial, Ann formó parte de un equipo que se encargaba de diseñar menús para máquinas de cifrado donde se buscaba romper los códigos enviados por los alemanes. Esta investigación sirvió como pionera para lo que ahora es la programación, sin embargo, por la delicadeza de la guerra, su trabajo e identidad permanecieron ocultas por muchos años.
Las mujeres y las matemáticas tienen una muy larga historia juntas que ha traído consigo grandes descubrimientos. Estos no solamente innovaron dentro de su área, sino que también ayudaron al desarrollo de otras disciplinas como las ingenierías y aquellos trabajos que utilizan matemáticas para llevarse a cabo. Sus estudios no solo nos dieron más información en muchos ámbitos sino también nuevas mujeres icónicas en la construcción.
En Panel y Acanalados Monterrey queremos destacar el valor de todas estas mujeres y conmemorarlas, ya que sin ellas no tendríamos los avances de hoy en día. ¿Quieres conocer más sobre días importantes y la industria de la construcción? Recuerda que nuestro blog tiene entradas informativas que pueden interesarte, de igual manera no te olvides que llamando al 55 5888 9667 puedes cotizar gratuitamente productos de acero y otros materiales de construcción. ¡Llama ahora y obtén más información!
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