Los diversos tipos de aceros son parte de la espina dorsal de la industria de la construcción. Y es que el acero es un material tan versátil que cada una de sus variantes presenta características particulares idóneas para el levantamiento de una u otra obra, para la configuración de una u otra herramienta o para su uso en una u otra zona geográfica.

Al respecto, para este artículo preparamos una lista de 10 tipos de aceros que toda persona involucrada o interesada en el sector de la construcción, la herrería, la metalurgia e incluso la manufactura debe conocer, o bien, conocerá y utilizará en el algún momento. ¡Continúa leyendo y descubre de cuáles se trata y qué aplicaciones tienen!

Índice

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1. Acero al carbón
2. Acero corten
3. Acero corrugado
4. Acero galvanizado
5. Acero inoxidable austenítico
6. Acero inoxidable ferrítico
7. Acero inoxidable martensítico
8. Acero suave
9. Aceros efervescentes
10. Acero intemperizado
¿Qué tipo de acero es el más utilizado?
Referencias

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1. Acero al carbón

El acero al carbón es uno de los tipos de aceros más utilizados gracias a su versatilidad y costo accesible. Este material se caracteriza por contener una cantidad significativa de carbono, generalmente entre 0.05 y 2.1 por ciento, lo que le confiere propiedades mecánicas específicas como dureza y resistencia.

A partir de esta aleación se desprenden muchos de los otros tipos de aceros de la lista que podrás conocer a lo largo de este artículo.

Al respecto, se estima que de la producción total de acero en el mundo, el 90 por ciento es de acero al carbón. Por ello no es casualidad que se trate de un material que se encuentra presente en casi toda estructura en la que realizamos nuestras actividades y en gran parte de los productos que usamos de forma cotidiana en nuestra casa o trabajo.

En este sentido, algunas de las construcciones en las que podemos encontrar este tipo de acero son las siguientes:

casas;
edificios;
naves industriales;
torres de energía y telecomunicaciones;
recintos deportivos;
plazas comerciales;
oficinas;
fábricas.

Asimismo, el acero al carbón es una aleación de gran utilidad todo tipo de industrias, en las que tiene diversas aplicaciones:

Trabajador soldando una viga de acero al carbón

fabricación de chasis, carrocerías y componentes estructurales de vehículos;
producción de tuberías y recipientes de presión;
manufactura de herramientas de mano y maquinaria;
elaboración de componentes de electrodomésticos como refrigeradores y lavadoras;

2. Acero corten

El acero corten es un tipo de acero al que también se le conoce como hiper-oxidado, cuya principal característica visual es una capa de óxido color rojizo que le brinda una apariencia desgastada, pero al mismo tiempo llamativa. Dicha capa tiene además el objetivo de proteger de la corrosión al interior del material.

Hablamos de un metal idóneo para la configuración de estructuras arquitectónicas públicas de aspecto clásico o rústico. Su coloración cambia constantemente por el efecto que la luz produce en él. También presenta una notable resistencia frente a las condiciones climáticas.

En cuanto a su composición, el acero corten es una aleación con bajo contenido de carbono, compuesto por pequeñas cantidades de cobre, níquel, cromo y fósforo.

Acercamiento a la fachada de un edificio construida con acero corten - Tipos de Aceros

3. Acero corrugado

El acero corrugado es un tipo de acero al carbón laminado con gran resistencia a la tensión, sumamente útil y uno de los más importantes para la construcción moderna.

El producto más característico de esta categoría, la varilla corrugada, es fundamental para la construcción de algunas de las estructuras más importantes en todo tipo de edificaciones:

Trabajador armando una columna de acero corrugado con varillas - Tipos de Aceros

postes;
tuberías;
puentes;
muros de contención;
columnas;
trabes;
vigas de concreto;
guarniciones;
ballenas.

Asimismo, este material puede ser manipulado para adquirir distintas formas y obtener elementos como estribos, columpios, canastas y bastones.

El diseño del acero corrugado optimiza la distribución de cargas. Las corrugas en la superficie de este material permiten una mejor adherencia al concreto, factor que contribuye al levantamiento de estructuras sólidas. De igual manera, este tipo de acero absorbe los esfuerzos de tracción, lo que impide que el hormigón se fracture.

Asimismo, es un material dúctil, lo que permite doblarlo y cortarlo con facilidad. Por otra parte, esta misma ductilidad ayuda a una buena distribución de esfuerzos ante situaciones de gran impacto, como son los movimientos telúricos, donde se requiere mayor absorción de energía para evitar la deformación, fisuración o el colapso de una estructura.

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4. Acero galvanizado

Entre los diversos tipos de aceros, el acero galvanizado destaca porque se encuentra recubierto con una capa de zinc.

Para ello se lleva a cabo un proceso conocido como galvanización, en el que se sumerge al acero en un baño de zinc fundido para brindarle una protección frente a los agentes oxidantes, alargando su vida útil. Es ampliamente utilizado en la construcción y la industria por su durabilidad y resistencia.

Al respecto, se trata de un metal utilizado en la elaboración de elementos como los siguientes:

Rollos de acero galvanizado apilados unos sobre otros dentro de un almacén

Rejas
Puertas de herrería
Vigas
Soportes
Tuberías
Láminas
Techos
Columnas
Puentes
Carreteras
Señales de conducción
Cercas

Por otra parte, el acero galvanizado presenta una muy buena resistencia al calor: aguanta temperaturas extremas en cortos periodos de tiempo.

Su durabilidad es la cualidad más destacada, ya que la capa de zinc que le protege le da una vida útil de más de 70 años; incluso, de 150 años en ambientes rurales y de 100 a 150 años en ambientes industriales. Si el acero galvanizado está expuesto a ambientes muy corrosivos, su periodo útil puede reducirse a 25 años.

Otro aspecto a destacar es que el recubrimiento galvanizado también le brinda al acero un aspecto brillante, por lo que su uso puede ligarse a aplicaciones estéticas. Pese a ello resulta más económico en comparación con metales como el acero inoxidable, por lo que es una opción útil en proyectos de bajo presupuesto.

Una cuestión más a tomar en cuenta es que el acero galvanizado, como sucede con otros tipos de aceros, es un material reciclable. Por esta razón contribuye a la reducción del impacto ambiental en proyectos de construcción.

5. Acero inoxidable austenítico

El acero inoxidable austenítico es la variedad más común y una de las más utilizadas dentro de los diferentes tipos de aceros inoxidables. Se caracteriza por su estructura cristalina austenítica, que le confiere una excelente resistencia a la corrosión y una gran ductilidad, es decir, la capacidad de deformarse sin romperse.

Asimismo, el acero inoxidable austenítico contiene altos niveles de cromo y níquel, lo que no solo mejora su resistencia a la oxidación sino que también le permite mantener su integridad estructural a temperaturas extremas. Por otra parte, presenta una gran capacidad para mantener la higiene y una muy buena resistencia al desgaste.

Tubos de acero inoxidable de diversos diámetros

Cada una de las cualidades anteriormente mencionadas con anterioridad lo hacen idóneo para la fabricación de elementos como los que te presentamos a continuación:

utensilios de cocina;
equipos médicos;
componentes para la industria alimentaria.

El acero inoxidable austenítico se divide en dos subgrupos: series 200 y 300. La serie 300 contiene un alto contenido de níquel, que le otorga mayor resistencia a la corrosión, por lo que se le da más variedad de aplicaciones. Por otra parte también se recurre a la serie 200 por su resistencia al impacto y tenacidad.

6. Acero inoxidable ferrítico

El acero inoxidable ferrítico destaca por su alta resistencia a la corrosión y su estabilidad a altas temperaturas. Se compone principalmente de cromo, con un contenido que varía entre el 10.5% y el 30%, y una cantidad baja de carbono. A diferencia de otros aceros tipos de aceros inoxidables, no contiene níquel, lo que lo hace más asequible.

Este acero es conocido también por su buena resistencia mecánica. Es por ello que se encuentra en diversas industrias y se emplea para la fabricación de elementos tanto de uso común como industrial:

componentes automotrices;
electrodomésticos;
equipos de cocina;
plantas de procesamiento de petróleo o gas natural;
monedas.

Es importante destacar que estos aceros son más fáciles de soldar que los martensíticos, aunque los de alto contenido de cromo pueden volverse frágiles cerca de las zonas soldadas.

7. Acero inoxidable martensítico

El acero inoxidable martensítico es conocido por su alta resistencia y capacidad de endurecimiento por tratamiento térmico. Este tipo de acero contiene entre 12% y 18% de cromo y una cantidad significativa de carbono, lo que permite su transformación a una estructura martensítica a través de procesos de enfriamiento rápido (templado).

El acero inoxidable martensítico se distingue de otros aceros inoxidables por su capacidad de alcanzar una dureza elevada, lo que lo hace ideal para aplicaciones que requieren alta resistencia al desgaste y la abrasión, como la fabricación de estos artículos:

cuchillos;
herramientas de corte;
componentes de válvulas;
piezas de maquinaria que deben soportar condiciones de alta tensión y uso intensivo.

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8. Acero suave

El acero suave es conocido por su bajo contenido de carbono (máximo 2.1 %), al cual se le agregan también cromo, cobalto, fósforo, manganeso y azufre. Se trata de un material altamente dúctil y manejable, así que puede doblarse, estirarse o deformarse sin que se rompa, característica que facilita su soldadura.

Entre los diversos tipos de aceros, el acero suave se utiliza frecuentemente en la producción de artículos que requieren una forma específica y precisa:

piezas de automóviles;
perfiles estructurales;
varillas;
tuberías
placas;
piezas de electrodomésticos;
estructuras para edificios;
clavos;
tornillos;
alambres.

El acero suave se procesa tanto por laminado en caliente como en frío. En ambos casos se consigue una gran maleabilidad y resistencia.

9. Aceros efervescentes

Los aceros efervescentes se caracterizan por la presencia de pequeñas burbujas de gas atrapadas en su estructura durante el proceso de solidificación.

Al respecto, esta aleación se clasifica dentro de los diferentes tipos de aceros por su método de producción, que involucra la adición de elementos desoxidantes como el aluminio o el silicio en cantidades limitadas. Esto provoca una reacción química que genera gases, principalmente dióxido de carbono, formando burbujas en la matriz del acero.

Estas burbujas le otorgan al acero efervescente una textura única, con una superficie más rugosa y una densidad ligeramente inferior a la de otros aceros. Y aunque este metal puede presentar una menor resistencia estructural debido a las inclusiones gaseosas, es apreciado por su facilidad de mecanizado y su menor costo de producción.

Por ello, es comúnmente utilizado en aplicaciones donde la alta resistencia no es crucial:

componentes de menor carga;
ciertas partes automotrices;
estructuras ligeras;
láminas delgadas;
alambres;
perfiles.

Por otra parte, existen cuatro tipos de acero efervescente, que van de los completamente desoxidados a los levente desoxidados:

Muertos: acero completamente desoxidado mediante un agente desoxidante antes de la colada. Solidifica sin burbujas de gas, por eso se le llama “muerto”.
Semi muerto: ha sido parcialmente desoxidado, es decir, se produce cierto desprendimiento de gas.
Acero con borde: es un acero que no ha sido desoxidado, lo que implica que mediante la solidificación hay un desprendimiento de gas evidente. Es durante esta etapa que surgen pequeños orificios en la superficie del metal, los cuales deberán cerrarse en la laminación en caliente.
Acero tapado: es un acero con borde que fue levemente desoxidado en el proceso de solidificación, por lo que también hay menos segregación de impurezas.

10. Acero intemperizado

También conocido como acero resistente a la intemperie, se trata de un acero de baja aleación que desarrolla una capa protectora de óxido al ser expuestos a la lluvia o humedad, lo que evita que sufran una corrosión posterior.

Esta característica elimina la necesidad de pintura o recubrimientos adicionales, minimizando el mantenimiento y aumentando la durabilidad. Es idóneo para estructuras de externas que requieren alta resistencia a la corrosión, como puentes, vehículos, torres, contenedores y edificios expuestos.

Dentro de su composición química hay bajos niveles de carbono, menos de 0,3 %, cantidad que mantiene su ductilidad y resistencia. Adicional, contiene mínimas cantidades de otros elementos de aleación como molibdeno, vanadio y titanio. Específicamente, el cromo, níquel y cobre, son los elementos que vuelven al acero intemperizado resistente a la intemperie.

Estructura de vigas de acero en construcción - Tipos de Aceros

¿Qué tipo de acero es el más utilizado?

El acero al carbón es uno de los más utilizados en todo el mundo. Por ejemplo, una de sus variantes, el acero corrugado, en su forma de varilla o malla electrosoldada, y en conjunto con el concreto, se emplea para la configuración de elementos estructurales como cimentaciones, cadenas, columnas y trabes de todo tipo de edificaciones.

Asimismo, los perfiles estructurales o comerciales de acero al carbón son ampliamente utilizados para el levantamiento de estructuras metálicas de grandes, medianas y pequeñas dimensiones de espacios industriales, comerciales y residenciales. Dichos perfiles también se emplean para la elaboración de carrocerías de vehículos para transporte de mercancías.

Otro tipo de acero ampliamente utilizado en el mundo es el galvanizado, en forma también de perfiles, pero principalmente de láminas, las cuales se utilizan para la elaboración de cubiertas, muros divisorios e incluso fachadas.

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